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¿Qué es la simplicidad voluntaria?

Desliza hacia abajo

En los últimos años, la simplicidad voluntaria se transformó en un gran movimiento. Consiste en la elección de reducir la presencia del desorden exterior y de las posesiones materiales que son irrelevantes para el propósito de la vida de cada uno. Muchas personas optaron por reducir sus horarios de trabajo, sus ingresos y sus niveles de consumismo. Esto se debe a que prefieren tener más tiempo antes que más dinero y porque encuentran más satisfacción al contribuir en su comunidad antes que en tener una casa más grande o un nuevo coche. 

Un modo de vida simple es atractivo por muchas razones. Por empezar, se ocupa de los aspectos más complicados, insalubres y poco éticos vinculados al consumismo. Algunas personas simplifican sus vidas por razones personales y económicas, como por ejemplo para saldar sus deudas, reducir el estrés y recuperar la administración de su tiempo. Otras se vuelcan a la simplicidad por razones espirituales porque quieren evitar que el materialismo las distraiga de la vida espiritual. Muchas otras personas eligen la simplicidad voluntaria por razones ecológicas y para acercarse a un modo de vida sustentable y en armonía con la naturaleza. 

¿Qué puedo hacer para elegir
la simplicidad voluntaria?

Dado que el estilo de vida occidental actual consiste en utilizar muchos de los recursos de la Tierra, es innegable que debemos reducir nuestros hábitos de consumo. Gracias a la simplicidad voluntaria, esta reducción se transforma en un proceso alegre, que construye comunidad y que es muy gratificante. La simplicidad voluntaria ayuda a crear las condiciones para una existencia respetuosa y sustentable. Aquí compartimos algunas sugerencias para que simplifiques tu vida: 

      • Reduce la cantidad de kilómetros que recorres en tu coche en un 10 % cada año. Utiliza la bicicleta para realizar tus compras e incluso para ir a trabajar. 
      • Compra menos. Antes de adquirir un nuevo producto, pregúntate: “¿Lo necesito? ¿Lo quiero?”. 
      • Utiliza menos papel. Comparte la suscripción a un periódico con tu vecino o lee las noticias en internet.
      • No compres libros. Lee libros de tu biblioteca local. 
      • Evita consumir moda descartable. Compra ropa de segunda mano o marcas sustentables.
      • Usa la creatividad con las sobras de comida. En lugar de desecharlas, aprende cómo inventar nuevos platillos. 
      • Ten tu propio huerto. O únete a una granja de tu comunidad. 
      • Evita el exceso de envoltorios. Comprar alimentos a granel y cocinar en casa te pondrá en contacto con un modo de vida más natural.

La idea detrás de la simplicidad voluntaria es que no necesitamos acumular más posesiones, dinero o actividades para ser más felices. En cambio, necesitamos menos objetos materiales y más conexión humana. Menos ruido y más silencio. Menos pantallas y más naturaleza. La simplicidad voluntaria nos permite construir relaciones significativas con otros seres vivos y con todo el planeta. Comienza con cambios pequeños y verás los beneficios y el impacto que estás haciendo en muy poco tiempo.